Alerta amarilla en 17 provincias del país por Fenómeno de El Niño

Alerta amarilla en 17 provincias del país por Fenómeno de El Niño

de Maria Teresa Simaliza Tenelema -
Número de respuestas: 1

La alerta amarilla declarada en 17 provincias de Ecuador por el Fenómeno de El Niño exige que los distintos niveles de gobierno actúen de manera coordinada:

  • Gobiernos provinciales: Deben liderar la planificación regional de emergencias, priorizando recursos para infraestructura crítica, coordinación con instituciones nacionales y apoyo técnico a cantones y parroquias.

  • Gobiernos cantonales: Deben organizar planes locales de respuesta, incluyendo sistemas de alerta temprana, brigadas de emergencia, revisión de drenajes y refuerzo de carreteras y puentes, además de informar a la ciudadanía sobre medidas preventivas.

  • Gobiernos parroquiales: Deben enfocarse en la protección directa de la comunidad, identificando zonas vulnerables, promoviendo la participación ciudadana y facilitando medidas de evacuación y mitigación.

La información sobre El Niño debe utilizarse para fortalecer la acción climática, integrando estrategias de adaptación y asegurando el uso eficiente de los recursos disponibles para minimizar riesgos.


En respuesta a Maria Teresa Simaliza Tenelema

Re: Alerta amarilla en 17 provincias del país por Fenómeno de El Niño

de Dayana Stefanía Naranjo Pozo -
Buenos días, estimada compañera

Gracias por tu aporte, muy claro y bien estructurado. Coincido en que la declaratoria de alerta amarilla debe incentivar una coordinación real entre los distintos niveles de gobierno, no solo en el papel. Me parece especialmente acertado que destaques la necesidad de fortalecer la planificación regional desde las provincias, porque muchas afectaciones por El Niño, como deslizamientos, crecidas de ríos o interrupciones viales superan los límites cantonales y requieren una visión más amplia.

También creo que lo que mencionas sobre los municipios es fundamental: sin un mantenimiento adecuado del sistema de drenaje y sin una comunicación eficaz con la ciudadanía, incluso lluvias moderadas pueden convertirse en emergencias graves. En cuanto a las parroquias, comparto tu idea de que su cercanía con la comunidad las convierte en actores clave para la organización local y la identificación de vulnerabilidades.

En general, tu planteamiento refuerza algo esencial: la información anticipada sobre El Niño debe traducirse en acciones concretas y sostenidas, no solo en declaraciones. Una gestión preventiva, con buen uso de recursos y participación comunitaria, puede marcar la diferencia entre un evento manejable y una crisis mayor.

Gracias, saludos cordiales
Dayana Naranjo