Aunque adaptación y mitigación son estrategias complementarias para gestionar y reducir los impactos del cambio climático, estos términos tienen definiciones y enfoques diferentes:
- Adaptación: se refiere a los ajustes en sistemas humanos o naturales como respuesta a estímulos climáticos proyectados o reales, o sus efectos, que pueden moderar el daño o aprovechar sus aspectos beneficiosos. La adaptación se refiere a los impactos del cambio climático.
- Mitigación: intervención humana encaminada a reducir las fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y potenciar los sumideros de carbono. La mitigación se refiere a las causas del cambio climático.