¿Cuáles deberían ser las medidas que tomen los gobiernos provinciales, cantonales y parroquiales, cada uno, frente a este tipo de información?
La alerta amarilla implica reforzar la preparación frente a riesgos, especialmente ante eventos como el niño, requiere que cada nivel de gobierno active acciones según sus competencias.
- Gobiernos provinciales: deben coordinar mediante comités provinciales de gestión de riesgos y fortalecer campañas preventivas sobre zonas de riesgo y protocolos
- Municipios: actualizan planes de contingencia, activan los COE cantonales y habilitan albergues temporales con servicios básicos garantizados.
- Parroquias rurales: organizan comités comunitarios de emergencia y promueven reservas de alimentos y suministros para posibles incomunicaciones.
En conjunto, la alerta amarilla busca prevenir y reducir impactos mediante coordinación interinstitucional, planificación anticipada y participación comunitaria.